
Voy a tocar las teclas en el fin del mundo
voy a colgar un arpegio de la última ola
hasta que el kiwi pierda el horizonte
hasta que el Dios-Hombre saque del mar la Isla del Sur
y canten las ballenas
voy a tocar a rebato
voy a subir el piano a la montaña.
Hazme el amor hasta que la corteza del kowhai se vista de amarillo
Nueva Zelanda tiembla si pones tus manos en las mías
voy a tocar las teclas en el fin del mundo
voy a tocar cuando me arranquen los dedos
aunque tenga que morir dentro del piano.
(Inspirada en El Piano de Jane Campion, Nueva Zelanda, 1993)